Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el CEIP Diego de Almagro organizó una actividad innovadora: invitar a mujeres destacadas de la localidad para compartir sus experiencias profesionales y personales con el alumnado. El objetivo: romper estereotipos, visibilizar roles femeninos diversos y sembrar semillas de igualdad en las futuras generaciones.
Mujeres que Rompen Moldes: Un ejército de roles diversos
El evento reunió a un elenco de mujeres cuyas trayectorias abarcan desde la política hasta el arte, pasando por la educación y el emprendimiento. Entre las invitadas destacaron:
- Marta Rivero, concejala del Ayuntamiento de Almagro.
- Rosa García, directora de la Universidad Popular.
- Teresa González, recién jubilada como bibliotecaria municipal.
- Ángela Morcillo, periodista y locutora de Onda Almagro.
- Natividad González, monitora de encaje de bolillos en la Universidad Popular.
- Covadonga Calderón, actriz de reconocida trayectoria.
- Amaia Cabezas, empresaria pastelera.
Cada una compartió anécdotas, desafíos superados y consejos, demostrando que no hay límites para las aspiraciones de los niños presentes.
Preguntas que reflejan curiosidad y conciencia social
Los estudiantes de 4º de Primaria prepararon un cuestionario lleno de ingenio y sensibilidad. A Marta Rivero, concejal delegada de las áreas de Medio Ambiente; Parques y Jardines; Protección Civil; Personal; Logística; Cementerio Municipal; Punto Limpio y Limpieza Municipal; Caminos rurales; Obras y Comunicaciones internas, le plantearon desde inquietudes prácticas —como la reparación de un bache en su barrio o la mejora de las porterías del campo indoor— hasta cuestiones imaginativas, como la posibilidad de “traer el estadio Santiago Bernabéu a Almagro”.
Pero también hubo espacio para la reflexión profunda. Los alumnos preguntaron a Rivero si “siempre soñó con ser concejal” y qué pasos hay que seguir para lograrlo. La edil respondió con honestidad: “Me hubiera gustado ser enfermera, porque adoro ayudar a la gente. Ser concejal es temporal; cuando termine, volveré a mi trabajo”. Con esta respuesta, no solo humanizó su rol político, sino que enfatizó la importancia de perseguir vocaciones auténticas.
Educación en igualdad: Más allá de las aulas
La actividad no se limitó a escuchar experiencias. Rivero aprovechó para invitar a los estudiantes a visitar el Ayuntamiento, donde podrán conocer de primera mano cómo funciona la administración pública y qué implica ser concejal. Esta iniciativa busca acercar las instituciones a los más jóvenes, fomentando su participación ciudadana y despertando posibles vocaciones políticas.
Por su parte, otras invitadas como Ángela Morcillo (periodista) y Amaia Cabezas (pastelera) destacaron la importancia de elegir profesiones por pasión, no por género. Morcillo relató cómo superó prejuicios en un medio tradicionalmente masculino, mientras Cabezas compartió el desafío de equilibrar su negocio con la vida familiar.
Un legado para el futuro
El CEIP Diego de Almagro demostró que la educación en igualdad requiere ejemplos tangibles. Al exponer a los estudiantes a mujeres reales —con logros, dudas y resiliencia— se normaliza la diversidad de roles y se desmontan mitos sobre “trabajos de hombres o mujeres”.
Teresa González, la exbibliotecaria, resumió el sentir del evento: “Es fundamental que los niños vean que las mujeres podemos ser líderes, creadoras y agentes de cambio en cualquier ámbito”.
Actividades como esta refuerzan la importancia de integrar referentes femeninos en la educación, un paso esencial para cerrar brechas y construir futuros libres de límites.
