El Ayuntamiento y la Universidad Popular cuentan con un desfibrilador desde este mes. La Policía Local también lleva un DEA-desfibrilador externo automático- en el coche de patrulla.
Calatrava Digital.- El Ayuntamiento de la ciudad se sumó a la nueva convocatoria del programa “Salva un corazón, salva una vida” de la Diputación Provincial de Ciudad Real. En esta ocasión, las oficinas centrales del Ayuntamiento y la Universidad Popular ya tienen instalado el dispositivo DEA o DESA por las siglas desfibrilador externo automático.
El concejal de Deportes, Jesús Santacruz, ha explicado que la elección de los lugares se debe a la concurrencia de personas en estos dos espacios. La Universidad Popular es centro formativo que acoge a diario a cientos de personas en las distintas actividades, talleres y cursos que se desarrollan de lunes a viernes. Respecto al Ayuntamiento, Santacruz tomó la idea de instalar el dispositivo en las oficinas centrales del Ayuntamiento, del curso que tuvo lugar el pasado mes de diciembre en el que los ponentes hablaron de lo adecuado de crear la Plaza Mayor como espacio cardioprotegido. El tercer desfibrilador no se ha instalado en un lugar fijo. La Policia Local solicitó tener uno que lleva en el coche de patrulla para poder usar en cualquier momento y situación que pueda surgir.
Almagro cuenta con un total de seis desfibriladores. A los tres nuevos adquiridos, hay que sumar los que ya estaban instalados en los dos pabellones deportivos de la ciudad y en el campo de fútbol.
El programa también incluye formación. Los asistentes reciben información sobre cómo identificar una parada cardiorespiratoria y sobre cómo se llevan a cabo las maniobras de reanimación cardiopulmonar. En el Plan de Formación han participado 1.109 personas de toda la provincia, la mayoría de ellos monitores deportivos, Policía Local, Protección Civil, Guardia Civil, Cruz Roja, etc. Almagro ya ha tenido un curso pero en próximas fechas tendrá lugar otro ciclo formativo.
En el conjunto del territorio ciudadrealeño, la Diputación ha financiado la instalación de 179 desfibriladores, lo que ha supuesto una inversión que alcanza los de 324.800 euros. En concreto, se ha procedido a proveer un módulo de rescate cardíaco por cada 2.800 habitantes, a los que hay que unir los que existen en diversos centros sanitarios. En España la tasa media es de uno por cada 5.000 personas. Ya son 98 pueblos que se han sumado al programa “Salva un corazón, salva una vida”. Del total de desfibriladores, 172 han sido instalados por los ayuntamientos, diez en dependencias y edificios de la Diputación y un grupo de siete son de libre disposición. El hecho de que los datos estadísticos apunten a que cada 20 minutos se produce un paro cardíaco en España ha llevado al Equipo de Gobierno a plantear la llegada de este nuevo servicio a los pueblos. Se trata de proveer el material necesario para que se pueda hacer frente con éxito a un caso de muerte súbita o de fibrilación ventricular. De ahí que muchos de los desfibriladores hayan sido ubicados en lugares frecuentados por deportistas o donde se registra una mayor afluencia de personas, informa la Diputación en su página web.