Calatrava Digital.- Ha nacido en Castilla-La Mancha el vino Tabarnia, una iniciativa de la Bodega Parra Jiménez de Las Mesas, en la provincia de Cuenca, que se pone en marcha contra el independentismo catalán y en alusión directa al territorio que lucha contra el separatismo de Cataluña, esa comunidad ficticia bautizada como Tabarnia. La bodega promotora lanzará este vino al mercado el próximo 14 de febrero y, según explican, lo hacen “en honor al amor que sentía Quijote por las tierras de Tabarnia”.
En la etiqueta posterior de la botella, se pueden leer las palabras de la novela de Cervantes sobre Barcelona pero cambiando el nombre de la ciudad por el de Tabarnia: “Tabarnia es archivo de la cortesía, albergue de los extranjeros, hospital de los pobres, patria de los valientes, patria de los ofendidos y correspondencia grata de firmes amistades y en sitio y belleza, única”.
Además, el etiquetado explica que un 3% de los beneficios de las ventas del vino irán destinados “a los afectados por el independentismo”. La bodega Parra Jiménez ha producido un vino de la variedad tempranillo con el que quieren reivindicar la unidad de España y del que han elaborado 40.000 botellas que comercializarán a partir del 14 de febrero. La noticia ha tenido eco en varios medios nacionales y también en Cataluña.
Tabarnia será un vino ecológico -como el resto de la producción de Parra Jiménez- y se ha criado en tinos y fudres de madera de roble francés. “Son 36.000 litros de tempranillo que no se ha clarificado ni filtrado, ni tiene levaduras”, han dicho desde la bodega a varios medios de comunicación. Los promotores espera que su nuevo varietal maride con “productos catalanes” tales como el “pan com tomate, la botifarra, calçots o las carnes locales”.
La Bodega Parra Jiménez, según informa El Español, nació en Las Mesas (Cuenca) en 1993 de la mano de los hermanos Parra. Está dedicada al cultivo propio de la vid, siguiendo los principios de la agricultura ecológica. Cultiva variedades autóctonas españolas, como el tempranillo, graciano, cariñena, bobal (tintos) y airén, macabeo, parellada, moscatel y verdejo (blancos). Son productos de calidad, con múltiples matices, y, cómo no, sostenibles con el medio ambiente. La inmensa mayoría de su producción, un 95% se dedica a la exportación.