Desde la concejalía de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Miguelturra, se ha emitido un enérgico comunicado para informar y condenar los recientes actos vandálicos contra el mobiliario urbano, particularmente las señales de tráfico. La concejala del Área, Nieves Almansa, ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para identificar y erradicar estos destructivos actos que representan un significativo costo para las arcas municipales.
“El Ayuntamiento lamenta profundamente estos incidentes, que suponen un coste elevado para las arcas municipales”, declara Almansa. “Estos actos no solo afectan a la importante funcionalidad de las señales sino que suponen un alto coste económico para el Ayuntamiento, y a fin de cuentas lo pagamos todos con nuestros impuestos”.
Los recientes actos vandálicos han afectado a cuatro señales de tráfico, algunas de las cuales estaban ubicadas cerca del cruce del paso a nivel de Renfe, instaladas hace menos de un mes. Otros incidentes ocurrieron en el Camino de las Minas y en el paraje de La Cobatilla. “Estas señales las pusimos hace un mes y han vuelto a ser tiradas”, añadió la concejala, evidenciando la frustración y la necesidad urgente de soluciones.
Almansa también recordó que en la urbanización 2000 ya hubo incidentes vandálicos en la señal contra la violencia hacia la mujer, un hecho que subraya la gravedad y recurrencia del problema.
Actualmente, los operarios municipales están dando prioridad a las señales del cruce de las vías, consideradas las más importantes para la seguridad vial. “Esperemos que por última vez”, expresó Almansa con un tono de esperanza y determinación.
La concejalía de Seguridad Ciudadana de Miguelturra está haciendo un llamamiento vehemente a los ciudadanos para que se involucren activamente en la protección del patrimonio urbano. La colaboración ciudadana es crucial para identificar a los responsables y prevenir futuros daños. Estos actos vandálicos no solo perjudican la funcionalidad y seguridad de las señales de tráfico, sino que también implican un costo económico significativo para todos los vecinos, quienes terminan pagando las reparaciones a través de sus impuestos.
Con la implicación de toda la localidad, Miguelturra puede hacer frente a estos desafíos y preservar el mobiliario urbano, asegurando que los recursos municipales se destinen a mejoras y no a reparaciones innecesarias.