Este mes de octubre marca un momento decisivo para la comunidad artística de Almagro, y especialmente para aquellos que han seguido de cerca la trayectoria de la Galería Fúcares, un espacio que durante cinco décadas ha sido una piedra angular del arte contemporáneo en España. El cierre de esta emblemática galería, el próximo 25 de octubre, después de cumplir exactamente 50 años y un día desde su apertura, supone un hito cargado de nostalgia y reflexión para su fundador, Norberto Dotor, y todos los que han compartido su pasión por el arte.
Un legado de cinco décadas
Norberto Dotor, que fundó la galería en 1974, no solo ha sido un comerciante de arte, sino un verdadero visionario y defensor de las artes plásticas en una pequeña localidad como Almagro, con apenas 9,000 habitantes. La longevidad de la Galería Fúcares en un entorno tan reducido es un testimonio no solo de su compromiso, sino de la calidad del trabajo exhibido y el profundo respeto que ha inspirado en la comunidad artística.
“Yo no sé qué va a ser de mi vida sin la galería”, comenta Norberto en un tono melancólico. Este espacio, que ha sido su vida entera, ha conectado a Dotor con lo que más le interesa: el arte. En una emotiva entrevista a la emisora local Onda Almagro, Dotor reconoce que el panorama artístico actual en Castilla-La Mancha ha cambiado radicalmente, con menos apoyo institucional y un contexto que ha hecho insostenible la continuidad de la galería tal como la conocemos.
Una despedida con música y arte
El último día de la Galería Fúcares no será una despedida sin más. Norberto ha planeado una serie de eventos para cerrar con broche de oro, incluyendo exposiciones en el Hospital de San Juan y la Iglesia de San Agustín en Almagro. Estas muestras incluirán una selección de obras de su extensa colección privada, que abarca desde pinturas y dibujos hasta esculturas e instalaciones, intentando conectar sinergias entre las piezas a lo largo de los años.
Además, el día del cierre está planeado un concierto especial, aún pendiente de confirmación, que podría convertirse en el toque final de esta emotiva clausura. Norberto, fiel a su espíritu humilde, admite que no tienen suficiente presupuesto para organizar el evento y que le “da corte” pedir apoyo a través de un crowdfunding, aunque no descarta que alguna ayuda pueda aparecer.
50 años de historia: arte, cultura y comunidad
La Galería Fúcares no solo ha sido un espacio para la exposición de arte, sino también un punto de encuentro para artistas, coleccionistas y amantes de la cultura. A lo largo de los años, ha organizado exposiciones de renombrados artistas como Miró, Tapies y Guinovart, eventos que en su momento atrajeron a multitud de personas que hacían fila para poder entrar. “Había colas para entrar en las primeras exposiciones”, recuerda Norberto con una sonrisa nostálgica. Los domingos abrían por la tarde debido a la gran afluencia de público.
Sin embargo, los últimos años han sido más complicados. La falta de apoyo institucional y los desafíos económicos han ido socavando las posibilidades de mantener a flote la galería, que ha pasado de ser un centro cultural de referencia en la región a enfrentarse a la dura realidad de un contexto cada vez más adverso.
Un futuro incierto pero lleno de posibilidades
A pesar del cierre inminente, el futuro de Norberto Dotor y de su valiosa colección de arte sigue siendo tema de debate. Existen propuestas para convertir su colección en el núcleo de un centro de arte contemporáneo en Almagro, un proyecto que podría dar nueva vida al legado de la galería. Según Norberto, tanto el alcalde como el presidente de la Diputación Provincial han mostrado interés en que su colección permanezca en la ciudad y se utilice como punto de partida para crear un espacio cultural de referencia en la región.
“Es lo que más me apetecería”, admite Norberto, aunque señala que las negociaciones y las condiciones para que esto ocurra aún están en curso. Además, con motivo del 50 aniversario, se han organizado mesas redondas, conferencias y visitas guiadas a cargo de personalidades reconocidas del mundo del arte contemporáneo, lo que promete atraer a un público diverso y fomentar el diálogo sobre el estado actual del arte en Castilla-La Mancha.
El arte contemporáneo en Castilla-La Mancha: luces y sombras
En una región que, según el propio Norberto, parece haberse quedado atrás en cuanto al apoyo al arte contemporáneo, el cierre de la Galería Fúcares es también un síntoma de un problema más amplio. “El arte contemporáneo está pasando un mal momento en la región”, lamenta. En el último informe del Observatorio de la Cultura, la comunidad autónoma se posicionó entre las últimas en cuanto a inversión y valoración del arte. Norberto critica la falta de un proyecto coherente por parte de la Junta de Castilla-La Mancha, y no duda en señalar que solo el Museo de Arte Abstracto de Cuenca es el único centro de arte verdaderamente riguroso en la región.
El cierre de la Galería Fúcares marca el fin de una era, pero también abre una ventana de oportunidades para reimaginar el futuro del arte contemporáneo en Castilla-La Mancha. Norberto Dotor, a sus 50 años de trayectoria, no cierra la puerta a seguir contribuyendo con su conocimiento y experiencia, especialmente si el proyecto del centro de arte en Almagro se materializa.
Lo que es seguro es que el 25 de octubre no será solo un día triste; será una celebración de todo lo que la Galería Fúcares ha representado para el arte en Almagro y más allá.