Calatrava Digital.- “Fue desagradable y traumático, te quedan ahí los miedos y el trauma de ese momento, pero indudablemente hay que volver a las obligaciones diarias, tenemos mucho trabajo por delante en este mes de agosto, Agradecer todas las muestras de ánimos y de afecto que he recibido en mi móvil, en las redes sociales, a mi familia, muchas llamadas, es de agradecer y ha hecho desde luego que recuepere el ánimo.
Yo ya presenté la denuncia ese mismo día, en su momento, y el Ayuntamiento está estudiando este tema. Tampoco me ha dado tiempo para hablar más con los servicios jurídicos del Ayuntamiento. Desde luego cuando se produce una agresión hay que denunciar, y yo inmediatamente presenté la denuncia cuando salí con el parte médico del Hospital General.
Ella me decía que tenía la culpa de algo que le había pasado a su madre, pero tampoco mediaron más palabras, simplemente fue la agresión. Más que nada fue el miedo que tuve a esas horas de la tarde en una zona centrica de Ciudad Real con esta agresión. Indudablemente hay que denunciar cuando se produce un hecho de este tipo. Estos días he ido leyendo que esta persona había agredido a otras mujeres, y lo que animo es a que presenten las denuncias por estos hechos que son incalificables y no se tienen que volver a repetir.”
Así se expresaba en su primera comparecencia pública la concejal de Fiestas Populares, Igualdad y Medio Ambiente del Ayuntamiento ciudadrealeño, Manuela Nieto-Márquez, tras haber sufrido una agresión el pasado miércoles sobre las 15:00 horas de la tarde, cuando la edil regresaba a su domicilio en la céntrica calle Calatrava de Ciudad Real.
La “agresora en serie” que tiene atemorizado a todo un barrio de la capital ciudadrealeña, fue puesta en libertad con cargos por el Juzgado de Instrucción número 3 de la capital, tras ser detenida por su última agresión a la concejal de festejos del ayuntamiento capitalino, Manuel Nieto-Márquez.
El juez imputó provisionalmente a la agresora ser la presunta autora de los delitos de lesiones y de atentado contra la autoridad, estableciendo como medida cautelar la obligación de que comparezca en el juzgado los días 1 y 15 de cada mes, hasta la celebración del juicio oral.
Mientras, la “agresora en serie” continúa en la calle a la espera de que el juzagado decida sobre su historial de agresiones, ya que este no ha sido solamente un caso aislado y puntual, o por su condición de concejal del ayuntamiento, ya que dicha agresora ha actuado en varias ocasiones contra otras tantas mujeres, con el mismo modus operandi, eligiendo su victima al azahar en la calle y agrediendolas sin mediar palabra o motivo aparente alguno, por lo que tiene varias denuncias acumuladas en la comisaría de la Policía Nacional de la capital. Solo falta que esta delincuente vuelva cualquier día a apuntarse una nueva víctima a su larga lista de agresiones y volvamos de nuevo a lamentarnos.
