“Me dirijo a ustedes de esta manera al no poder haber hecho todos los actos de la semana cultural que estaban programados para la no feria 2020. Como ya sabrán el primer acto era el de reconocimiento a todos aquellos que habían combatido la Covid 19 de forma altruista y desinteresada y en ese acto me iba a dirigir a ellos y a todos ustedes. Al no poderse llevar a cabo he creído conveniente hacer lo a través de las redes en un día tan señalado para los almagreños.
Quizá no soy yo el único que en este día tiene una sensación ambivalente.
Si este fuera un año normal en una situación normal, ahora estaríamos de ferias, en los chozos y en las atracciones.
Lamentablemente, no es posible. Eso, a mí y a ustedes, nos produce una evidente tristeza.
Tristeza, claro está, porque los niños y los adultos no puedan participar de esa expresión colectiva de felicidad y alegría que es parte esencial de nuestra identidad desde hace siglos y que seguirá siéndolo, Dios lo quiera, todavía indefinidamente.
Pero tristeza, sobre todo, porque el mal que nos ha cambiado la vida, además de dar al traste con el gozo de la feria, con la economía de tantos y con las rutinas de todos, ha segado la vida de casi medio centenar de almagreños y ha sumido a sus familiares y amigos en profunda desolación, por la perdida, sí, pero también por las condiciones en las que han debido darle el último adiós.
Como alcalde siento las muertes de todo corazón y acompaño a los familiares y amigos en el sentimiento. Me gustaría añadir en este punto de mis palabras a Rosa María y a Tony, los dos jóvenes que desgraciadamente sufrieron el fatal accidente.
Ruego a nuestro patrón san Bartolomé y a nuestra patrona la Virgen de las Nieves que acojan en su seno a los fallecidos y extiendan sobre nosotros su manto protector.
Ahora bien, la guerra no ha terminado. El virus continua entre nosotros y de forma insidiosa, aprovecha cualquier oportunidad para hacer daño. Es cierto que ahora somos más conscientes de la situación, conocemos mejor al enemigo y conocemos mejor nuestros recursos. Pero es cierto también igualmente que no podemos permitirnos ni un momento de relajación mientras no dispongamos de herramientas definitivas para exterminar al virus o hacerlo inocuo.
Por lo tanto, los almagreños, los españoles, la humanidad entera y especialmente la parte de ella que se siente menos vulnerable, debe conducirse en todo momento con disciplina, con responsabilidad y con paciencia; cumplir tenaz, cívica y escrupulosamente las normas sanitarias, y no perder de vista que la salud de todos depende del comportamiento de cada uno.
Yo estoy seguro de que los almagreños así lo haremos y de que, más temprano que tarde, dejaremos atrás esta pesadilla; que el año que viene, si Dios quiere, la Covid solo sea un mal recuerdo. Entre tanto, consolémonos con el cariño y la compaña de los próximos.
Un fuerte abrazo y disfruten en la medida de lo posible de las no ferias 2020″.
Daniel Reina Ureña
Alcalde de Almagro